Velo de novia: Un tratamiento de rejuvenecimiento facial mínimamente invasivo

El velo de novia es un tratamiento de rejuvenecimiento facial mínimamente invasivo que se basa en la aplicación de microagujas para estimular la producción de colágeno y elastina. Este tratamiento es una alternativa no quirúrgica a la cirugía estética y puede ayudar a mejorar la apariencia de la piel de la cara, el cuello y el escote.

El velo de novia se realiza con un dispositivo que lanza micro agujas hacia la piel. Estas microagujas perforan la piel a una profundidad de entre 0,5 y 3 milímetros, lo que provoca una pequeña lesión controlada. El cuerpo responde a esta lesión produciendo colágeno y elastina, que son las proteínas que dan a la piel su firmeza y elasticidad.

El velo de novia puede ayudar a mejorar la apariencia de la piel de la cara, el cuello y el escote de varias maneras, entre ellas:

• Reduce las arrugas y líneas de expresión.

• Mejora la elasticidad de la piel.

• Reduce las manchas y la hiperpigmentación.

• Mejora la textura de la piel.

• Uniformiza el tono de la piel.

El velo de novia es un tratamiento seguro y eficaz para la mayoría de las personas. Sin embargo, no es adecuado para personas con:

• Infecciones activas en la piel.

• Enfermedades autoinmunes.

• Cáncer de piel.

• Piel muy sensible.

Antes del procedimiento, se aplica una crema anestésica en la zona a tratar. Una vez que la crema anestésica ha hecho efecto, se comienza a aplicar las microagujas.

El número de sesiones necesarias para obtener resultados óptimos depende de la edad del paciente, la gravedad de las arrugas y el estado de la piel. En general, se recomiendan entre 3 y 6 sesiones, con intervalos de 4 a 6 semanas entre cada sesión.

Después del procedimiento, la piel puede estar enrojecida e irritada. Se recomienda aplicar una crema hidratante y protectora solar durante los días posteriores al 

Si estás buscando un tratamiento de rejuvenecimiento facial mínimamente invasivo, el velo de novia puede ser una buena opción para ti.